Nuestros Blogs

QUIEN ES SANTO JR


 Consciente de que se acerca el momento de tomar en sus manos la leyenda de plata, el Santo Jr se prepara para ser la tercera generación del enmascarado de plata en los próximos meses independientemente de que su padre se logre recuperar de su lesión en la medula espinal.


“Esto nadie me lo ha dicho, yo pienso que necesito merecérmelo y necesito ganármelo, a pulso y entrenando, mostrándole a mi papá que si me lo merezco, que puedo”, dijo.


”Después de lo que paso y que tuvo en su espalda, como que sentí más presión, como más peso, y ahora si ya estoy, yo creo que este año ya vamos a tener al Santo Jr allá arriba”, comenta el joven que a sus 18 años sabe que está por iniciar una nueva vida al portar el legado más importante de la lucha libre en la historia de México.











A título personal sus planes para este 2014 son “seguir estudiando, espero irme a Japón otra vez en verano y después de Japón empezar con el Todo X el Todo, empezar a luchar no como el Santo Jr sino como Tempestad para foguearme y todo eso, no quiero entrar de lleno con el nombre del Santo Jr y mi papá tampoco, es demasiado grande para mí por el momento”.


Y sin dar a conocer una fecha para su posible presentación confiesa que los retos sobre su persona no se han hecho esperar, “eso ya nos ha pasado con el Solitario, que estoy viendo a mi papá luchar y va y se mete conmigo, yo todavía no puedo hacer nada pero si van a ver varias rivalidades que me están esperando ya como el Ángel Blanco, también ya me dijo te estoy esperando, me provocan y los provoco pero todavía no se puede hacer nada, se va a poner bueno”.


El tema deportivo pasa a segundo término pues como hijo le resulta hoy complicado imaginar lo que vive su padre y como esto les cambiará la vida a ambos en los próximos meses.






“Yo apoyo la idea de que no hay que jugarle al vivo, yo pienso que si la mayoría de los doctores le dijeron que no luche, por el momento y por la gravedad de su lesión que no lo haga, yo quiero a mi papá bien, sano”.


Si bien su debut se había estructurado como un proyecto a largo plazo, debido a la lesión de su padre los tiempos serán recortados pero sin forzar su debut.


“Primero iba ir tres años seguidos a Japón, este sería el segundo año, pero yo creo que ya, no sé si será este año o el que viene pero va a ser más pronto de lo que se había pensado, no hay ninguna prisa, mi papá me dijo que no es presión ni nada, pero yo pienso que ya es tiempo”.














Con humildad coincide con su padre en que debutar con la máscara plateada sería precipitado, “el considera que yo todavía no estoy listo y yo considero que todavía no estoy listo, necesito entrenar y seguir echándole ganas y ya en un futuro cercano espero que sí”.


El sueño de debutar de la mano de su padre se mantiene en el aire pues todo dependerá de cómo salga el Hijo del Santo de su operación, “si todo sale bien en la operación si va a haber oportunidad, todo depende de eso, si se pudiera yo sería el más feliz, yo siempre me he imaginado debutar al lado de mi papá, no sé que vaya a pasar, solo Dios dirá”.